Cuando al fin acepté que mis actividades preferidas no tenían que ser como las actividades preferidas de las mayorías, pude dedicarme aun más y más tiempo a ellas con menos y menos “pesar” o vergüenza por quedarme fundido tanto tiempo en ellas. Con el tiempo, he podido quedarme haciendo lo que más me gusta sin pena alguna y sin buscar la aceptación o admiración de alguien por ello. Con en tiempo creo que llegué realmente así a fundirme en la misión de mi vida. Y ahí, en ese nivel, se vive una intensa y permanente emoción por existir, tanta, que es incomparable con la emoción que pudiera generarme cualquier otra convivencia en actividad común que, luego de comparar, he descubierto que no es lo mío.
Y quizá así ande mucha gente, en actividad común compartida, haciendo lo que las mayorías hacen o lo que está de moda hacer, conviviendo en esa actividad con otros, esos con lo que tiene en común el que ninguno ha descubierto todavía su misión existencial, esa que le da sentido a cada segundo de la vida. Entonces se puede desperdiciar cualquier segundo o, si no desperdiciar, por lo menos no confrontarse con el vacío de un tiempo indiferente.
Leí hace tiempo que al maestro Pablo Picasso algún día le preguntaron si no había momentos en que se aburría y respondió que sí. Le preguntaron cuáles y respondió: “Cuando hago cualquier otra cosa que no sea pintar o cuando recibo visitas”. ¡Me pasa algo tan similar! Pero en mi caso obvio no es pintar, sino leer, estudiar, escribir y dar conferencias (lo de las visitas si es igual). Fuera de eso, no me la paso tan bien. Y es hermoso alcanzar a darse cuenta de esos momentos, cuando no me la paso tan bien, y es sublime saber que todos esos momentos son opcionales, nunca forzosos. Lo forzoso es inversamente proporcional a la autoestima.
¡Vivo con entusiasmo! El entusiasmo sucedido por poder dedicar prácticamente todo mi tiempo exclusivamente a mis actividades preferidas. Un entusiasmo sucedido al descubrir que no tienes por qué darle gusto a nadie realizando alguna actividad que no te fascina. Cuando acepté esto, súbitamente apareció más y más tiempo para realizar mis actividades preferidas, al mismo tiempo fueron desapareciendo las visitas.
¡Emoción por existir!
(Cavilaciones de un domingo encerrado en silencio mientras leo, estudio y escribo de varios temas… y escuchando pajaritos en el jardín).
Me lo imaginé perfecto sentado, en silencio y casi creo que vi el jardín y escuché a los pajarillos! perdón es la habilidad rara de un arquitecto de recrear ambientes con solo describirlos, gran mensaje el que comparte el día de hoy, cuando uno decide hacer meramente lo que le hace feliz solo a UNO MISMO y no a los demás, es parte de aceptarse tal cual y a su vez aceptar que NO todos se atreven a hacer lo mismo, y por eso en ocasiones juzgan a quien se atreve a SER y a HACER Lo que más le gusta… sin duda usted allá escribe, y muchos acá leemos, usted allá escucha cavila y nosotros leyendolo buscamos ese momento de cavilación.. usted escucha pajaritos y yo el sonido de la lluvia… Eso es magia no? Gracias por este mensaje le mando un afectuoso saludo!!
Gracias por tu comentario querido Edgar. Te envío saludos. Bendiciones.
COMO VIVO SIN EXISTIR, COMO COMO LLEGO SIN QUE ME LLEGUEN, COMO ESCRIBO SIN QUE ME LEAN. LA VIDA NO ES SIMPLEMENTE PASARLA SOLO, SINO, CON LA MAS GRATA DE LAS COMPAÑÍAS CON QUIEN COMPARTIR.
UNA DE LAS COSAS QUE SIEMPRE APRENDÍ ES SER FELIZ, YA QUE DE DOS OPCIONES QUE HAY EN LA VIDA, ESTA ES LA MEJOR.
SE DICE QUE LA CARIDAD ES EL AMOR PURO DE CRISTO QUE SE DERRAMA AMPLIA MENTE EN CORAZÓN DE LOS HIJOS DE HOMBRES PARA QUE POR MEDIO DE ELLA PODAMOS SER SEMEJANTES A EL.
FELIZ DOMINGO A TI MI QUERIDO AMIGO ALEJANDRO, ABRAZOS A LA DISTANCIA.
LUIS.
Saludos Luis.
Una vez aprendí de un maestro. Cuando haces un “tener”, cuesta, pesa, es a Juerzas. Sin en cambio cuando es un “ser”; por ser feliz, por placer, por gusto, por emoción, por que me da la gana, por mi crecimiento, por mi transformación, los resultados son exponenciales (aunque en ocasiones lo hago, pero eso es otra historia). Cabe recordar la fórmula:
Intensión + Mecanismo (o movimiento) = Resultado
Donde: Intensión son los valores como: Amor, responsabilidad, compromiso, valor, respeto, entrega, poder, libertad, hermosura, amistad, etcétera.
Mecanismo (movimiento): La forma que se realice la actividad y lo importante, que tan rápido se haga esa actividad.
Extraordinaria aportación José de Jesús. Gracias. Saludos… bendiciones.